Una Europa competitiva debe ser una Europa con igualdad de género, ya que el potencial desaprovechado de la mano de obra femenina europea es inmenso. Para impulsar el crecimiento del PIB europeo, mejorar el empleo y la productividad y responder a los retos que comporta el envejecimiento de la población, el Año Europeo de las Competencias tiene que hacer hincapié en dotar a las mujeres de las capacidades adecuadas.
Las cifras son impresionantes. Un estudio reciente del Instituto Europeo de la Igualdad de Género (EIGE) ha demostrado que las políticas tienen un impacto mucho mayor en el PIB que las políticas de trabajo y educación. Según este estudio, la mejora de la igualdad de género en la UE para 2050 aumentaría el PIB per cápita entre un 6,1% y un 9,6%, lo que equivale a 1,95 a 3,15 billones de euros.
Principalmente en las áreas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM), hay actualmente una baja participación de mujeres, a pesar de la gran demanda laboral. La falta de mujeres en STEM también se debe a los estereotipos en la educación, a las diferencias de género en las opciones educativas y formativas, y a la falta de modelos femeninos, según afirma el EIGE.
Sin embargo, cerrar la brecha de género en STEM contribuiría a un aumento del PIB per cápita de la UE entre un 2,2% a un 3,0% en 2050, según el EIGE. En términos monetarios, cerrar la brecha de STEM supone a una mejora del PIB de 610.000 a 820.000 millones de euros en 2050, y el empleo total en la UE aumentaría entre 850.000 y 1.200.000 de aquí a 2050. Además, los nuevos puestos de trabajo ocupados por mujeres serían muy productivos, ya que el EIGE afirma que las mujeres con formación en STEM suelen trabajar en puestos de alto valor añadido.
Uno de los principales factores que frena a las niñas a la hora de cursar asignaturas STEM u otras profesiones femeninas “atípicas” es que, a nivel educativo, se siguen transmitiendo estereotipos sexistas a los alumnos. El personal escolar suele reproducir estos estereotipos de género, ya que falta formación suficiente sobre temas relacionados con el género y el material de apoyo educativo está desactualizado, confirma el EIGE.
Sin embargo, en muchos países de la UE se observa una tendencia positiva en la lucha contra los estereotipos de género en la educación escolar. Para poner dos ejemplos: los roles de género, los estereotipos y la igualdad se debaten en las asignaturas de ciencias sociales o de historia en la Folkeskole danesa y en Croacia, las normas para los libros de texto prescriben que “estos deben preparar a ambos sexos para una participación efectiva e igualitaria en todos los ámbitos de la vida” y “promover la igualdad de género”.
Aunque Europa parece ser cada vez más consciente de los problemas causados por la desigualdad de género, esta sigue siendo parte de nuestra realidad. Europa necesita empoderar a sus mujeres y dotarlas de las capacidades adecuadas, no solo durante el Año Europeo de las Competencias, sino siempre. Todo el mundo, independientemente de si es hombre o mujer, se beneficiará de la igualdad de género, y también lo hará nuestra economía.
Todos los datos y conclusiones sobre igualdad de género en este artículo proceden de los estudios del EIGE: “Beneficios económicos de la igualdad de género en la Unión Europea” y “El género en la educación y la formación”.
